Creados generalmente con madera, los alebrijes han adquirido un poco más de fama últimamente, siendo su aparición en la película animada producida por Disney, Coco, una de las mas recientes referencias a estas piezas artesanales.
La Real Academia Española define a los alebrijes como: figuras de papel maché, madera o barro, pintada de colores vivos, que representan un animal imaginario.
Sin embargo, la mayoría de los alebrijes están hechos de madera. En Oaxaca, los artesanos hacen uso de la madera del copal para hacer sus alebrijes.
Cuando se comienza el proceso de creación, el artesano deja volar su imaginación. Esto resulta en misteriosos alebrijes que se distinguen por su originalidad y rareza.
Unas de las características de los alebrijes es el material que se usa para crearlos y los vibrantes colores que los adornan, dijo Manuel Robledo, arquitecto, escultor y residente de Matamoros, Tamaulipas, México, durante una entrevista con The Rider.
Robledo dijo que el artista mexicano Pedro Linares, originario de Oaxaca, fue él que les dio vida a las figuras cerca del año 1936.
“El estuvo muy enfermo durante algún tiempo”, dijo el. “En ese proceso cayó en coma. Durante el tiempo que estuvo en coma, que ya lo daban por muerto, por cierto, [él] tuvo una serie de sueños en los cuales el veía animales … fantásticos creados por la mezcla de varios otros animales. Por ejemplo, gallos con cabeza de gallo y cuerpo de leones o de cabras, etc.”.
Robledo explicó que cuando despertó del sueño, Linares recordaba que dichas criaturas le gritaban: ¡Alebrijes!
“Entonces, cuando volvió en sí … él se dio a la tarea de retomar las ideas que había visto durante sus sueños y las empezó a trasladar precisamente en figuras de maderas intervenidas”, dijo el arquitecto. “Tomaba troncos y ramas de arboles y los intervenía con otras figuras”.
No se sabe a ciencia cierta donde fue que se empezaron a originar los primeros alebrijes. Robledo dijo que existe confusión en cuanto al lugar de donde estas artesanías surgieron ya que “se atribuye que fue en la Ciudad de México, pero en Oaxaca ellos ya estaban haciendo también una serie de figuras con diferentes materiales”.
En una entrevista con The Rider, Tony Zavaleta, profesor emérito de antropología en UTRGV, dijo que a diferencia de la representación que la cinta cinematográfica, Coco, les da a los alebrijes, estos no están relacionados con el Día de Muertos.
“La representación en la película Coco, la cual he visto, está creada en las mentes de los cineastas”, dijo Zavaleta. “Se ha convertido en una representación moderna del arte folklórico, pero no es algo antiguo en lo absoluto”.
Él dijo que las tradiciones y costumbres se van arraigando a la cultura de esta manera.
“Creo que [los alebrijes en Coco] son una nueva representación. Es una representación moderna”.
Robledo, por su parte, dijo que decir que los alebrijes son parte del Día de Muertos “es forzar un poquito las situaciones y aprovecharlo, desde el punto de vista de la mercadotecnia, pero, hasta donde yo sé, no tiene nada que ver”.
Los alebrijes están distribuidos por casi todo México e incluso internacionalmente.
Zavaleta dijo que, como todo producto, los alebrijes empezaron a distribuirse por diferentes ciudades, estados y países.
“Los comercializadores que compran arte folklórico para vendérselo mayormente a europeos y americanos, los distribuyeron”, él dijo. “Por ejemplo, los puedes encontrar en Guadalajara. Los encontrarás en cualquier lugar donde haya turistas”.
El explicó que una vez que la pieza sale de los talleres, entra al mundo de la mercadotecnia. Por lo tanto, se puede observar una incongruencia en cuanto a los precios de los alebrijes.
“Cuando iba a Oaxaca alrededor de 1980, podría nada más ir al taller o a la tienda y comprar un alebrije por $5 o $10 dólares”, dijo Zavaleta. “Entonces, esa misma pieza, una vez que entra al mercado, la vendían por $150 o $200 dólares”.
Robledo dijo que los alebrijes no deberían ser considerados como artesanías, si no como arte.
“La artesanía se atribuye más a objetos que se repiten constantemente”, dijo él. “Tú haces una cacerola, una piñata, etc. y haces mil de esas, pues obviamente el primero que la hace es un creador, un artista, y la figura es una obra de arte, ya las demás ya son reproducciones. Eso es una artesanía”.
Los alebrijes son totalmente distintos y tienen una creatividad directa, Robledo dijo.
“Pienso que hay un paso intermedio … entre la artesanía y el arte, y [los alebrijes] están mas relacionados con el arte”, él dijo.