A las 10 a.m. el 18 de diciembre de 2023, tomé mi asiento en un salón lleno de personas que en unos minutos tomarían el juramento para hacerse ciudadanos americanos.
Estaba sentada en el asiento número 106. Ese número, al igual que esa experiencia, es algo que no olvidaré fácilmente.
He vivido en los Estados Unidos casi toda mi vida. Atendí cada nivel escolar aquí, desde la primaria hasta la universidad. Por la mayor parte de mi vida, vi el trayecto que tomaba el gobierno sin tener la habilidad de contribuir mis ideas o opiniones en una forma que realmente hicieran un cambio.
Como residente, no tenía una voz en las elecciones, pero cada cambio que daba el gobierno tenía un impacto en mí, mi familia y la manera en que vivía mi vida. Aunque no era ciudadana, de todos modos tenía que vivir bajo las mismas leyes que cualquier otra persona en este país. La diferencia más presente en mi mente era que a la vuelta de cada elección, nada más podía ver el país, respirar profundo y esperar lo mejor.
Ese 18 de diciembre, al levantar mi mano derecha y relatar el juramento, me uní a los Estados Unidos como ciudadana. Finalmente tenía la habilidad de contribuir mis ideas y opiniones de una manera que realmente importaba.
Al final de la ceremonia, vi a adultos mayores abrazar a sus familiares con ojos llorosos. Vi a un señor abrazando su certificado a su cuerpo con una mano y con la otra sosteniendo la bandera estadounidense tan fuerte que sus nudillos se estaban blanqueando.
Al ver las reacciones de las personas alrededor de mi, al igual que las reacciones de mi propia familia, sentí lo importante que es el poder tener una voz en los trayectos del gobierno, especialmente cuando tienen tanto poder sobre la manera que vivimos nuestras vidas.
El martes marcará el día de las elecciones primarias. Esta elección determinará a los candidatos quienes estarán en tu papeleta de votación en las elecciones generales. Yo estaba preparada para enviar mi solicitud de registro electoral a tiempo para participar en las elecciones primarias, pero no lo pude entregar antes del último día de registro. Me sentí triste y afligida porque no iba a poder contribuir mi parte en las primarias. Pero si para ti existe la habilidad de salir a votar, es importante que lo hagas.
Si eres ciudadano, y estás registrado para votar, todavía tienes la oportunidad de hacer un cambio en este país: Los que tienen una voz deben usarla.